LA
BURLA DEL “IMPUESTO AL SOL”
Un
“sosias” de José María Aznar --aunque más tonto y sin
bigote-- que procura parecérsele, está buscando acomodo para la
debacle que se avecina en noviembre. Se acaba el tiempo y el señor
Soria no quiere acabar en la cola del paro. Por lo visto, cada cual
hace lo que puede. Y él está intentando poder, con la complicidad
de “La Camorra” de las eléctricas, al socaire de un
partido que hiede a corroña y carnuza. Quieren acabar con las
energías limpias, porque sería lo único limpio que quedase en el
paisaje.
Un
sabio sin letras, un hombre sin títulos, un maestro sin cátedra de
los que van quedando pocos, decía hace mucho: ”Llegará un
tiempo en que nos cobren por respirar”. Si alguien hubiese
dicho que tendríamos que volver con el cántaro a la fuente como en
el siglo pasado, se hubiese echado a broma. La diferencia está en el
supermercado y no en la fuente. Pero el agua de boca ya no es potable
aunque lo silencie la Administración, porque aún baja “lindano”
venenoso de Inquinosa por los grifos del Gállego hasta las
puertas de Zaragoza. Ese es otro nogocio: el del agua etiquetada.
¿Recuardan
el ataque de honestidad que aquejó al Ministro de Industria entonces
recién cristianado, apoyando a los cosumidores contra la obscena
rapacidad del oligopolio de las electricas? Pues miren en qué ha
quedado. El responsable de Industria, va a cerrar el paso a las
energías altrernativas, las energías renovables, las energías
limpias en España --uno de los países más soleados, más ventosos
y con más costas del planeta--, con la impudicia que consiente la
impunidad: con la audacia que otorga la promesa de un consejo de
administración vitalicio o poco menos, –ya lo verán ustedes-- y
la caradura del que piensa que no va a pasarle nada.
Cómo
va a creer nadie en Don Tancredo Rajoy y sus mariachis; cómo en su
regeneración moral si lo vemos chapotear en el cieno y mentir
incluso a las puertas de la campaña de otoño que puede ser su
infierno. Todo su equipo más próximo se ha puesto a manipular los
datos sin preocuparse de infundirles un mínimo de credibilidad. Es
tan poco lo que importa a los políticos la opinión de los
ciudadanos, como a los políticos el desguace de su decoro personal:
“Después de mi, el Diluvio”.
Por
eso este Gobierno miope y cojitranco que parece alumbrado en el Patio
de Monipodio, no tuvo propuestas para las Municipales como no tiene
ideas para las generales. Sus audaces estrategas renuncian incluso a
inventar y falsear: se limitan a denostar a los que llegan, como
“Ciudadanos” y “Podemos”, y a amenazar con “que viene
el lobo” sin entender que “el lobo” son ellos, de
suerte que nada se puede temer de los que lleguen.
No
basta con que “Tesla” lance acumuladores solares mas
eficaces ni que Europa abra la mano para no ir contra corriente. Hay
que servir a las eléctricas mientras lo permitan ¿verdad don José
Manuel?
Darío Vidal
30
/ 06 / 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario