RESACA DE ELECCIONES
Queda
anticuado y démodé hablar de Las Izquierdas y Las Derechas;
casi tanto como de izquierdas y derechas sin artículos y a secas. Se
está viendo estos días y en los últimos comicios, que tanto
“Ciudadanos” como “Podemos” parecen haber querido trascender
las etiquetas, porque a los electores se les han quedado estrechas
las costuras decimonónicas. La exigencia de regeneración moral no
es ya una demanda retórica restringida al penitencial periodo
electoral. Quienes no lo hayan entendido todavía van a tener que
comprenderlo a su pesar.
Los
ciudadanos de uno y otro color, burlados por líderes como el señor
Rajoy que trazó una actuación radicalmente opuesta al programa que
propuso el Partido Popular, no pueden olvidar que han perdido sus
casas por la torcida acción concertada de los legisladores, los
jueces, el gobierno y la banca, que han utilizado el desahucio
arbitrario, inducido o provocado –“y en diferido” como
gustaría definir la señora Cospedal al abuso de pagar toda la vida
una deuda ya satisfecha-- como saben mis amigos José Luis Martínez
Candial, Manuel Pizarro y Juan Alfaro Ramos director general adjunto
de Ibercaja, de los que un día hablaré para regocijo del
respetable, o los “damnificados” que no pueden sobrevivir
con su sueldo, si lo tienen, y que han sido engañados con las
estadísticas manipuladas por la propaganda urdida por los asesores y
los “brujos” más mediocres.
La
izquierda ya no se dedica al “tiro al cura”, a hacer leña
de las estatuas y a quemar libros, porque el discurso retórico e
incendiario ha dejado de dar juego en las tabernas. Pero como no
sabe qué hacer, opta por actividades más lúdicas y testimoniales,
aunque menos expuestas, como la de apoyar las arriesgadas campañas
de “Femen”(“Ni puta ni santa”, “Vade retro
ProVida”, “Dios es mujer”, “Jódete Sharia”, “Aborto
sagrado”, “Fuera de mi coño”, “Muerte a la patria”, “Mi
cuerpo es libre”...) y auspiciar las uniones de ellos
con hombres, ellas con mujeres y todos con bichos, sin preocuparse
del destino de miles de personas –y personos-- abandonados a
su suerte en el mar por criminales sin conciencia, --a bordo de
pateras o buques averiados y semihundidos--, sin combustible, sin
agua y sin víveres para que se mueran sin que los mate nadie,
mientras dicen apoyar a los palestinos, porque la derecha defiende a
los “sionistas”.
Entretanto,
la derecha caciquil y montuna, o sea la paleoderecha de
rosario y horasanta, consiguió que los obreros votasen al patrón
que vetaba a los empleados incómodos y escamoteaba jornales, y
quitaba concejales y ponía alcaldes con la coartada del Orden. Pero
con la globalización, ganó en omnipotencia y hoy la industria
agropecuaria esteriliza semillas silvestres --que son las de
siempre--, para imponer las de su firma, con fertilizantes
propios, del mismo modo que las agencias de calificación crediticia
se han instalado en el fraude delictivo, aprovechando el descrédito
del patrón-oro para que la bolsa genere crisis artificiales que
benefician a unos pocos. Dicho burdamente, en esa falta de confianza
se cimentan por decirlo impropiamente, las carencias éticas de
nuestros días.
Al
amparo del relativismo moral, la industria al servicio de la rapiña
ha convertido a las armamentistas en empresas para matar, al tiempo
que alistaban mercenarios civiles para la Guerra de Iraq. Lo mismo
que las farmacéuticas de Bush jr. y Rumsfeld crearon la “Gripe A”
y transmutaron en clientes a los pacientes que podrían sanar y no se
curan para que nunca terminen de morirse, como denuncia algún medio
de comunicación; fijan arbitrariamente los precios injustos;
administran la salida al mercado de productos ineficaces, y retrasan
la investigación hasta exprimir los últimos posos del beneficio. Y
ciertos accionistas del capitalismo más turbio y delictivo,
descienden a la sentina de barcos desfondados, con pistoleros,
narcotraficantes y gobiernos, para eliminar a “los que sobran”.
En
esta jornada de resaca de elecciones, en la que dicen los analistas y
los expertos que va a cambiar todo en España –¡que sea para
bien!-- me conformaría con que se restaurase la honorablidad de las
instituciones, la respetabilidad de las personas y la credibilidad
del vecino, no porque vayamos a creer que a partir de hoy ataremos
los perros con longanizas, sino porque es tarea imprescindible y
urgente ahuyentar el recelo en el trato con los otros. Sin anudar la
confianza no es posible sobrevivir: mirando de reojo no es posible
concertar acuerdos, hacer tratos, prestar dinero, comerciar y creer
en los demás. Dicen que, en tiempos de los abuelos bastaba con la
palabra; luego los acuerdos se sellaban con un apretón de manos, y
ahora han dejado de tener valor hasta los documentos firmados, los
contratos, las letras de cambio y el patrón-oro. Sin confianza no es
posible ningun tipo de intercambio. Como cuando decíamos antes de
la crisis del ladrillo que esto no podía seguir así. Y no siguió.
Debo
recordar la firme palabra de la anticuaria Carmen Valencia “La
Lela”, que por cierto no era lerda y sí exigente y estricta en
la negociación, cuando al cerrar un trato, alguien le ofreció más
de lo que habíamos pactado y se negó porque no tenía más que una
palabra.
No
es una muestra de caballerosidad y gentileza solamente: es el cauce
para iniciar confiadamente la regeneración que nos urge.
Es
la primera premisa para confiar en los políticos.
Darío Vidal
26
/ 05 / 2015
casino: bonus, login, withdraw and withdrawals - drmcd
ResponderEliminarcasino: bonus, 경상남도 출장마사지 login, withdraw and 오산 출장안마 withdrawals You can also use casino games as gifts. you can also use a variety 제천 출장샵 of 청주 출장샵 other casino games, such as slots, poker, roulette, 광명 출장샵