lunes, 29 de junio de 2015


EL FINAL DE UN SUEÑO

Este país es un amasijo de materia fecal: un potaje que sigue cociéndose con nuevos ingredientes que sofocan y vician el aire.
Pero aún no ha concluido el guiso. Cada jornada nos despierta con hallazgos inquietantes. El espectro social practicable del uno al otro extremo, incluidos los partidos políticos, los sindicatos y la patronal, esta contaminado. Una de las tendencias viables de centro-izquierda dirigida por Rosa Díez, se ha retraído y aislado contra todo pronóstico, mientras crece “Ciudadanos” y se desvanece la que encarnaba el sueño de renovación.
El movimiento inspirado en el lema “Podemos” próximo al cívico impulso auroral de los “Indignados del 15 M” alumbrado por Stephane Hessel, parece haberse marchitado y decaído con la misma celeridad que los “falansterios” que ideó Charles Fourier a finales del XVIII. La hermosa quimera idealista de la regeneración política se está hundiendo, pero no consumida por la utopía como algunos temían, sino aquejada de la misma epidemia que asola a las demás.
Hace unos meses –qué pronto pasa todo-- Pablo Echenique y Pablo Iglesias sugerían la imagen de unos soñadores posgraduados entusiastas, que querían poner a prueba sus ideas políticas como el viejo Platón, el doctor Negrin, Azaña y el profesor Tierno Galván aunque sin demasiada fortuna, confirmando que “el reino de los sueños no es de este mundo”.
Vino luego el traspiés de Íñigo Errejón, número dos de “Podemos”, interpelado por la prensa acerca de un contrato al parecer irregular con la Universidad de Málaga. Y a mediados de enero de 2014 se destapó que había firmado con el Centro de Esudios Politicos y Sociales (CEPS) del que es secretario general, un plan de actuación con el gobierno bolivariano para el estudio y difusión de “chavismo” según informó “El Economista”.
Mas tarde enturbiaron la ejecutoria de Pablo Iglesias ciertas maniobras de su novia Tania Sánchez, concejal de Rivas Vaciamadrid y militante comunista que benefició con una subvención dudosa a un hermano suyo, y tras presentarse a unas elecciones para la Comunidad de Madrid y ganarlas, dimitió como candidata a presidirla y abandonó Izquierda Unida con la consiguiente turbación, pues la plataforma “Convocatoria por Madrid” inaugurada el pasado viernes, sugiere que puede haberse convertido en un “submarino” de “Podemos”. Pero lo que últimamente ha hecho tambalear al partido, es el asesoramiento de Juan Carlos Monedero número tres de la nomenclatura, a varios paises iberoamericanos liderados por Venezuela y Ecuador, para crear una moneda capaz desbancar al dólar estadounidense. Y denuncian que así está financiándose el partido.
La urgente audacia de “Podemos” ha sembrado el recelo entre sus seguidores y marcado tal vez el final de un sueño.
Darío Vidal
24 / 02 / 2015

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